Crónica de una noche de marcha
Un clásico, aplicable a cualquier noche de marcha en cualquier época y con cualquier edad. Hay cosas que nunca cambian:
22:30 - Puerta de la Discoteca
Llegas a la discoteca, y curiosamente hay un cola peor que en el INEM. Te pones a esperar con los colegas, mientras observas que la cola no avanza, aunque una serie de tías buenorras,han entrado sin esperar cola. No te importa ya que, con ese culo, tu también las dejarías pasar.
23:00 - Puerta de la Discoteca
Empieza a hacer un poco de frío, pero la cola ha avanzado un poco. Tus colegas se han ido a comprar tabaco y te han dejado a ti solito esperando en la cola. Intentas disimular arrimándote al grupo de delante.
23:30 - Entrada a la Discoteca
Ya solo hay 2 personas delante de ti para entrar en la discoteca, y tus colegas sin venir. Al final decides que lo mejor es dejar pasar a la gente, hasta que lleguen tus colegas. Curiosamente, ahora la fila avanza mucho más rápido que cuando tu esperabas. De repente aparecen tus colegas echando peste a alcohol, pidiendo perdón por el retraso, argumentando que la máquina de tabaco estaba muy lejos. Entráis en la discoteca, no sin antes oír los gritos de la cola diciendo que os estáis colando.
00:00 - Dentro de la Discoteca
¡¡Esto sí que es ambiente!! Humareda de tabaco, olor a sudor de la pista de baile, poco espacio para moverse y hablando a gritos con tus colegas debido al volumen de la música. Te empiezas a preguntar porque esa mierda de local cobra a 5 € la copa. Buscando una explicación miras a la barra… Debe ser por la pedazo de tía que esta sirviendo cubatas. Una rubia con cara de viciosa, mascando chicle y bailando mientras pone las copas. De repente te ha entrado una sed enorme…
00:30 - En la barra
Tras media hora de empujones, pisotones, insultos, y algo más, llegas a la barra. Aún no sabes lo que vas a pedir, pero seguro que llevará alcohol. ¿Un martini?… no, es para nenazas. ¿Un vodka?… no la resaca es horrorosa. ¿Un Whisky?… eso es, un whisky. Además, para lucir mas, lo vas a pedir con agua en vez de con Coca-Cola. Hay que quedar como un macho.
Llamas a la camarera unas 30 veces, y cuando te ve y se acerca, de repente el camarero cuadrado con camiseta de marinerito ajustada, te pregunta que quieres… “el teléfono de la rubia” piensas. Le pides la copa. Te clavan 10 € por no llevar pase y ser más de las 12.
01:00 - En la pista de baile
Mientras volvías de la barra, te han manchado con tu propia copa unas 5 veces. No pasa nada, es whisky con agua. En ese momento piensas “¿por qué cojones he pedido whisky con agua?” Tus amigos están hablando con unas chicas. Todas parecen guapas y simpáticas. ¡¡Esta noche hay tema!!!
Cuando entras en la conversación, el amigo ligón del grupo te dice… “Mira ven que te presente a Vanessa”. El nombre es sugerente… pero solo el nombre. De entre el grupo de buenorras aparece algo parecido a una chica con bigote, gafas de culo de botella y unos pantalones pirata ajustados y subidos hasta el ombligo. Repentinamente, te han entrado una ganas de mear, que no veas. Corre, Forrest, Corre…
01:30 - En la puerta del baño
Menos mal, pensabas que aún te seguía. Por primera vez, el baño de los tíos tiene cola, pero tampoco tanto como el de las tías. De repente salen como unas 12 tías del baño de los tíos, con un pedal enorme. Ya te explicas la cola del baño.
Una vez dentro, el único baño libre esta lleno de vomitos. Mientras te bajas la cremallera y te la sacas con un mano, la otra la utilizas para taparte la nariz. Por cuestiones de seguridad, utilizas las 2 manos para guardártela. El típico borracho que se esta mojando la cabeza, te pide un cigarro y fuego. Tras mojar la piedra del mechero, te dice que tu mechero no funciona.
02:00 - Otra vez en la pista
Las chicas han desaparecido, y tus colegas tienen una cara de perro que no veas. Al parecer resulta que las chicas con las que estaban se han ido, porque no querían enrollarse con ellos y dejar a “Vanessa” sola. No, claro, te la querían encasquetar a ti. Cansado de oir frases como “Ya te vale”, “Por tu culpa”, “No podías hacerlo por nosotros” y “Eres un mal amigo”, decides que es un buen momento para pedir otra copa.
02:30 - En la barra
Cada vez vas cogiendo mas experiencia en esquivar cigarros, copas, pisotones y codazos. Además, la camarera rubia sigue bailando mientras sirve las copas. Intentas buscarle las pilas DURACELL en la espalda, pero lo único que descubres es que no lleva sujetador y lleva tanga. Cada vez te entra mas sed. Cuando consigues que te vea (o eso, o es que es bizca) la llamas. Cuando por fin la tienes en frente le dices “Me pones un tanga con coca-cola” e inmediatamente te das cuenta de tu error.
Ya no hay marcha atrás. Cuando la camarera te pregunta que qué es eso, le explicas que es una copa nueva que tiene ginebra, ron, whisky y vodka. Finalmente te la pone. Por ser copa especial te cobra 15 €. Te callas, y cuando acercas tu boca al vaso, empiezas a notar que el labio se te calienta. No estás seguro de beber, pero por 15 €, te bebes hasta el agua del water. El primer trago… los ojos en blanco, y un sudor frío recorre tu frente. Disimulando, intentas hacer como si estuviera bueno. Imposible, el aguarrás que te bebiste de pequeño te dolió menos al pasar por la garganta que el “tanga” con Coca-Cola.
03:00 - De vuelta a la pista de baile
Tus colegas siguen intentado ligar. Les animas a que beban un poco de tu copa para que te perdonen lo de las tías de antes. Al primero que lo prueba, empiezas a ver que le asoma la lagrimilla por el ojo derecho, y cuando puede hablar dice “un poco cargado para mi gusto” (poniendo voz de ultratumba). Tus otros amigos dicen que no quieren beber mas. Lástima… a ver que haces con la copa ahora.
03:30 - En la pista de baile
Empiezan a encender las luces de la discoteca. Parece que ya empiezan con las indirectas para vaciar el local. De repente aparece todo un rebaño de armarios empotrados con camiseta negra recogiendo vasos de las mesas. Es tu oportunidad para dejar el vaso. La música empieza a oírse mas baja. Ya no hace falta gritar para hablar, pero ¿de que hay que hablar ahora? Las parejas que están liadas aprovechan sus últimos instantes de gloria. Mañana será el día para contarlo. En caso de que la/el otra/otro no fueran guapos, siempre quedará la excusa del alcohol.
Decidís que os vais para casa, y al salir por la puerta, veis que las chicas que antes estaban con vosotros, están todas liadas con otros. Bueno, todas, todas, no… Vanessa, esta sentada en el sofá justo enfrente de la salida. Y NO HAY MAS SALIDAS. Ahora la cola es para salir. Tú no tienes prisa, pero parece que Vanessa tampoco. Tus amigos te dicen que avances, y tú les dices que pasen ellos primero. Ya tienes una solución: Cuando vayas a salir te taparas la cara, como si te hubieran dado un puñetazo en el ojo.
04:00 - En la salida
Estás a punto de salir. Te tapas la cara. De repente oyes: “¿Qué te ha pasado en la cara?”. Te apartas las manos y… es Vanessa. Tus amigos te dicen “Os dejamos solos, ¿vale?” Sales con Vanessa por la puerta y le explicas que tan solo te duele la cabeza. De repente te das cuenta de que es la única persona que se ha preocupado por ti, así que piensas… ¿le digo que si vamos a tomar algo? ¿le doy mi teléfono y quedamos otro día? …para qué, ¿PARA QUE SE DESCOJONEN TUS AMIGOS? ¡JA! Hay mas tías y mas días de marcha, pero curiosamente, casi siempre son iguales….
NOTA: A pesar de lo patético del día, al día siguiente se suele decir aquello de “Ayer lo pasamos de puta madre, ¿verdad?”.
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